Sin embargo, mis vacaciones no son tan... prometedoras.
Aunque a lo mejor lo son más, según se mire. Yo se supone que ya soy diseñador, me he publicitado miles de veces y lo sabéis, pero es que ahora va en serio. Por fin he acabado y me da un poco de miedito salir de casa a trabajar en serio.
En fin, siendo este otro tema a tratar más adelante y que iré contando conforme me salgan ofertas de curro, hoy voy a comentar otro de los grandes temas del veranito a parte de King África (y lo de grande va con segundas...)
Hoy he tenido que arreglar mi armario...! No es que vaya a salir de él; sino que he cambiado la ropa de invierno por la de verano y tal y buscando buscando he encontrado varios recuerdos que creía desaparecidos de mi mente. De ellos me han venido miles de imágenes a la cabeza... todas buenas.
Es raro como los malos recuerdos hacemos por olvidarlos... En fin... Si nos dejamos de nostalgia, a continuación os enseño lo más destacable de mi armario:
Éste es el aspecto de mi cuarto al quitar toda la ropa que había dentro de Narnia...
Si observamos con claridad vemos cómo debajo del montón se ve algo parecido a una cama y un escritorio, con su tele, su MacBookPro y todo eso...
También se observa un señor bajito, con gafas y bigote debajo de la camisa blanca.
Éste es mi cuarto cuando he quitado toda la ropa de verano.
Esa es la ropa de invierno que debo dejar en el armario devuelta.
Si hay de lo que me he dado cuenta, aparte de que tengo mucha ropa vieja, es que no sé doblarla...
Una de las cosas que he encontrado es mi traje de comunión... Iba de almirante... Ais...
¿Qué? ¡¡¿Ya he dicho que no iba a salir del armario?!!
Sin embargo él sí ha sido expulsado
Otras cosillas que dejé durante mi infancia fueron los juegos...
Entre ellos se encuentran el Dragon Ball Z Chess, los Warhammer, etc...
Bien, niños, hoy hemos aprendido como mi frikinidad me entró en el cuerpo allá por el 1999- 2000 por el gran Stan Lee...(fue en el estreno de X-Men dónde comprendí mi misión en el mundo...)
A parte de estas frikadillas, he encontrado también la caja de la Game Cube, una boina de esas de cuando se llevaban para parecer guay, un par de perchas rotas y una de mis chuletas, en este caso, de lengua; sobre Miguel Hernández y "La novela desde 1936": dos apasionantes temas que sin duda trataremos otro día...
No pongo la foto por razones obvias de seguridad, pero sí que os voy a presentar a la joya de la corona:
Me vienen miles de recuerdos, como los trabajos que tenía que hacer en "esto" mientras mis amigos lo hacían con el "Word", algo que no entendía lo que era... y creo que aún tampoco...
Me acuerdo de la veces que me quemé echándole carbón para que funcionara...
Y aquellos guiones de películas ideadas por Carlos y yo y que tenía que pasar yo a máquina...
Dios, "a máquina..."
Suena raro.
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